Las parafilias no implican trastorno mental
Es habitual tildar de trastornados mentales a quienes ejercemos nuestra libertad sexual mediante prácticas eróticas no convencionales. Lo cual sólo se puede sostener desde la osadía de la ignorancia o, peor, desde el odio del puritanismo moral de un extremo ideológico o el neopuritanismo del otro. Porque la comunidad científica que estudia la mente y la conducta y trata sus enfermedades las tiene despatologizadas cuando no producen angustia personal, no interfieren en otras facetas de su vida, no involucran otras personas sin consentimiento válido o no suponen riesgo significativo de lesión o muerte.